Sé que los jugadores de videojuegos esperaban «The Last of Us» con ansias, y también sé que se sienten un poco como los fanáticos de Harry Potter o El Señor de los Anillos al ver las adaptaciones cinematográficas de las obras literarias. Mirando la serie con la perspectiva como si no hubiese jugado a videojuegos y nunca me hubiese interesado por el tema, cosa que no es cierta (mi genero de juegos es diferente), intentaré explicar por qué deberían de ver la serie los no fanáticos a los videojuegos. Aquellos que me han escuchado en el podcast, saben que, específicamente, tengo un debilidad por algunas de las series de HBO.
Sin embargo, a pesar de mi falta de experiencia con los videojuegos de zombis, «The Last of Us» me ha cautivado de una manera sorprendente. Tal vez sea el dramatismo emocionante de la historia, o la impresionante calidad gráfica y de sonido, o incluso la habilidad de la industria de los videojuegos de crear experiencias inmersivas e impactantes. Sea lo que sea, «The Last of Us» ha logrado atrapar mi atención y aprecio, y es un ejemplo de por qué los videojuegos son más que solo un pasatiempo para los entusiastas.
La serie «The Last of Us» sorprende a un no fanático de zombies
Antes de profundizar, quiero aclarar que no soy una gran admirador de zombies, infecciones y cosas similares, pero decidí no tenerlo en cuenta y seguir adelante con la visión. Menos mal. Es difícil organizar las turbulencias de pensamientos que giran en mi cabeza después de devorar los primeros tres episodios de la serie de HBO protagonizada por Pedro Pascal y Bella Ramsey (que ya había cautivado mi corazón con su interpretación de Lyanna Mormont en Juego de Tronos), pero lo intentaré.
La serie de «The Last of Us» ha logrado sorprenderme a pesar de mi falta de entusiasmo por el género zombie, incluso puedo decir que no he visto todavía «The Walking Dead». Quizás sea la intensidad emocionante de la trama, la impresionante calidad gráfica y sonora, o la capacidad de la industria de los videojuegos de crear experiencias inmersivas e impactantes. Sea lo que sea, «The Last of Us» ha capturado mi atención y aprecio, y es un ejemplo de por qué las series de televisión basadas en videojuegos son más que solo un entretenimiento para los fanáticos.
Una de las debilidades de las series de televisión modernas es la de llenar la trama de giros y sorpresas solo para mantener a los espectadores pegados a la pantalla. Con el tiempo, y con los episodios lanzados en bloque, hemos perdido el gusto por saborear los detalles. En un mundo que corre rápido, a veces es agradable dejarnos sorprender por la lentitud y disfrutar de las pequeñas bellezas que nos rodean y que somos capaces de producir.
En resumen, «The Last of Us» es una serie que combina acción y poesía, con una trama que no solo te mantiene al borde de tu asiento, sino que también te permite apreciar la belleza de los detalles y disfrutar de una narrativa poética. Una obra que invita a la reflexión y al disfrute, sin caer en el vicio de los giros innecesarios.
La Belleza en la pantalla: el arte en «The Last of Us»
Las series de televisión son entretenimiento, pero también son una forma de arte. Mientras veía los primeros tres episodios, realmente deseé estar en una sala de cine con una bolsa de palomitas y una pantalla grande frente a mí. Una vez más, HBO ha logrado llevarnos el cine en formato casa, creando una secuencia de escenas, en la que se narra la historia, sin muchas sorpresas pero con unos diálogos y unas imágenes que van a cautivar a cualquiera que disfrute el séptimo arte.
En particular, la fotografía me impactó y me dio escalofríos, como solo los grandes productos seriales son capaces de hacer. Esto se suma a la increíble actuación de todo el reparto: desde Bella Ramsey, pasando por Pedro Pascal y Anna Torv (que, muchos la recordamos por su papel de Olivia Dunham), otra razón más para ver la serie de HBO.
Es cierto, que ver ahora «The Last of Us» después la pandemia tiene un cierto impacto, en lugar de enfrentarnos a seres apocalípticos, tuvimos que hacer frente a restricciones impuestas por la pandemia de COVID-19, como la necesidad de presentar una autocertificación ante la policía para poder ir al trabajo y las medidas tomadas por autoridades que coartaron la libertad de muchos ciudadanos. Antes, mirábamos productos similares como algo puramente de ciencia ficción, pero hoy en día, tenemos un escalofrío silencioso que nos trae a la mente antiguos recuerdos desagradables, quizá este sea uno de tantos motivos por los que «The Last of» Us será todo un éxito.
