Hace unos días me decidí a ver una de las mejores series que Netflix (España y Estados Unidos) incorporó a su plataforma; se trata de Argon, una serie coreana acerca del mundo de las noticias.
Con una música en su presentación que nos mete en clima desde el vamos, Argon nos cuenta la vida de Kim Baek-jin, presentador de un famoso programa de noticias nocturno de la cadena HBC elegido Mejor Periodista del Año en reiteradas oportunidades. Con una vida personal difícil, viudo y con una hija adolescente que adora pero con quien no sabe relacionarse.
La serie también nos muestra los pormenores por los que tienen que pasar los periodistas novatos al dar sus primeros pasos y los experimentados, quienes deben adaptarse a estos tiempos muchas veces convulsionados, frívolos donde lo único que cuenta es dar la primicia y con las redes sociales que informan sin verificar las fuentes.
Al comienzo de la serie vemos a Kim disculpándose por un caso de corrupción que desde Argon denunciaron pero que resultó ser falso, o eso al menos es lo que parece. Este hecho y otros similares provocaron que el famoso noticiero fuera perdiendo audiencia y que finalmente penda de un hilo. Desde la misma cadena la gente de “Noticias 9” son sus peores rivales, con el director Yoo del noveno piso a la cabeza. A través de este personaje vemos que, lamentablemente, cuando se trata de corrupción en el mundo de la política, la gente es bastante parecida en todas partes del mundo.
No solo de series estadounidenses y británicas se vive. Argon es un claro ejemplo.
También encontramos a Lee Yeon-hwa, interpretada por la encantadora actriz Woo-hee Chun, llamada “mercenaria” por todos (colegas y jefes) ya que trabaja en la cadena televisiva ocupando el lugar de quienes son despedidos. La joven tiene un contrato por dos años del cual le faltan solo seis meses para quedar en la calle. El grupo de Argon la recibe de manera distante pero nada impide que ella trabaje dando lo mejor de sí. El productor del noticiero, Shin Chul, es quien le tiende una mano desde el primer momento. Tengo que reconocer que este personaje, muy bien interpretado por el actor Won-sang Park, se ganó mi admiración episodio tras episodio.
Y uno de los primeros hechos que nos muestran es el derrumbe de un centro comercial que acabó con la vida de varias personas; a partir de acá se desencadenan una serie de eventos que van a dejar ver cómo tantas veces se manipulan y tergiversan las noticias por la simple ambición de llegar a ser los primeros en impactar y capturar a quienes se encuentran del otro lado de la pantalla.
“Esas personas no murieron en ara de tu éxito” dice Kim en un momento a su rival dentro de la cadena HBC. Y esta frase define al protagonista de la serie que tiene una entereza moral que me lleva a reflexionar y a preguntarme si en la actualidad, alguien dentro del mundo del periodismo lo posee. Pensemos que sí, no me gusta la frase “todo tiempo pasado fue mejor”.
Argon cuenta con una temporada de 8 capítulos de aproximadamente una hora de duración cada uno.
A los seguidores del cine y de la televisión coreanos les decimos que el protagonista de Argon, Ju-hyuk Kim, trabajó en “The Servant” y “My Wife Got Married”; Woo-hee Chun, la “mercenaria” y encantadora Lee protagonizó el drama “Han Gong-ju” en el 2013 y Wong-sang Park fue uno de los protagonistas de la serie TV “Healer”.
El director de Argon es Yoon-jeong Lee (“Golden Time” y “El Príncipe del Café”). La fecha de estreno de Argon en Corea del Sur fue el 4 de septiembre del 2017 y llegó a Netflix a fines de noviembre del mismo año.
Espero que la disfruten tanto como yo.